Era obvio que no me iba a resistir a escribir sobre Nosferatu después de ver el tráiler de la nueva versión que va a estrenar Robert Eggers a finales de año.
La historia de Drácula se ha contado mil veces desde que Bram Stoker publicó su famoso libro en 1897 y, a su vez, existen ya dos remakes de la primera Nosferatu, basada en la misma historia.
Suelo decir a menudo que no entiendo por qué se hacen remakes en el cine con todas las historias que hay aún por contar.
Pero en este caso, reconozco que estoy deseando ver Nosferatu estas Navidades, aunque he visto ni sé cuántas versiones ya de la historia de Drácula, Jonathan y Mina.
Pero empecemos por el principio:
🧛♀️ Nosferatu, 1922
Me parece que este es el conde Drácula más terrorífico de todos los que he visto. No impone tanto como el de Christopher Lee, ni tiene la elegancia del de Bela Lugosi, ni es tan atractivo como el de Gary Oldman, pero da-mucho-miedo.
Eso sí, en la película no es el conde Drácula, sino el conde Orlok, igual que también se cambiaron otros nombres y localizaciones para saltarse los derechos de autor de la novela.
(Spoiler: no funcionó, la viuda de Stoker los demandó, ganó el juicio y se dedicó a quemar las copias de la película. No ella en persona, ya me entiendes)
🧛♀️ Nosferatu, 1979
Llega otra versión protagonizada por Klaus Kinski, quien ya había tenido un papel en el Drácula de Bram Stoker de 1977 protagonizada por Cristopher Lee y que quizá es más conocido por Aguirre, la cólera de Dios, y su tremendo final.
En mi opinión, era un remake necesario, ya que de la versión de 1922 apenas había copias y no eran de muy buena calidad.
Aparte, en 50 años el público había cambiado, el lenguaje y los medios del cine también, y hacía falta recuperar esta historia. El resultado fue increíble y la película recibió muy buenas críticas.
🧛♀️ La sombra del vampiro, 2000
Esta película no es exactamente un remake de Nosferatu. En realidad es una historia ficticia en la que vemos a Murnau, el director de la versión de 1922, contratando a un auténtico vampiro para que su película sea más realista. Esta vez, el vampiro es Willem Dafoe.
Ojo, que esta historia no está alejada de la realidad. A ver, Max Schreck, protagonista de Nosferatu en 1922, no era un vampiro real (hasta donde sabemos) pero quiso que lo trataran como tal durante el rodaje.
No permitió que nadie lo viera de otro modo que no fuera caracterizado como el conde Orlok y mantuvo su actitud sombría y atormentada en todo momento, hasta el punto de que muchos se aliviaron cuando terminó el rodaje, pues se creaba un ambiente extraño y opresivo. Todo un actor de El Método.
🧛♀️ Nosferatu, 2024
Y llegamos al último Nosferatu, caracterizado por Bill Skarsgård a quien ya hemos visto interpretando al mítico Pennywise en las dos últimas películas de It y que, estoy segura, va a interpretar a un conde Drácula memorable.
No hay mucho más que te pueda contar por el momento, solo que tengo muchas ganas de verla.
Su director ya nos ha dado La Bruja (2015), El Faro (2019) y The Northman (2022), así que el listón está muy alto.
Si quieres que cuente más cosas sobre estas películas, solo tienes que decírmelo en los comentarios.
Pero ahora… vamos a ver qué le pasa a este Nosferatu del siglo XXI
¿Dónde quedaba el poder?
¿Dónde quedaba el orgullo de su linaje?
¿Dónde quedaba el miedo?
Él, cuya sangre era casi tan antigua como la misma tierra que pisaba, se veía obligado a esconderse como una rata.
Había gente en todas partes.
Gente que lo miraba, que lo apuntaban con extraños artilugios tecnológicos, que se reían e incluso se burlaban.
Nadie huía en su presencia. Nadie temblaba. Nadie suplicaba.
Excepto ella.
Preciosa con su rostro perfilado con sombras y suaves colores.
Inocente mientras atravesaba aquel parque en mitad de la noche, canturreando algo que solo ella podía oír.
Indecente con su ropa escasa.
Podía oler la dulzura de su sangre y sentir los pausados latidos de su corazón.
Y su piel… su piel traía el aroma de un perfume que jamás había percibido.
Qué hermosa era.
Hubiera sido una compañera perfecta para él en las sombras.
Pero tenía demasiada hambre.
Hace un millón de años participaba yo en un podcast de cine, "Lo que Eternia se llevó", y le hicimos un especial a Drácula. Las pelis que elegí para mi intervención fueron... chachachaaaaaaaaan: "Nosferatu" y "La sombra del vampiro".
No tenía ni idea de que se estrenaba esto a final de año, así que me haces very happy indeed.
(El enlace al episodio, de solo cuatro horas XD: https://go.ivoox.com/rf/22134768)